Ficha técnica:
Duración:112 minutos
Director: Luis Ospina
Director: Luis Ospina
Guión: Luis Ospina
Música: Guillermo Gaviria
FotografÃa: Luis Ospina
Productora: Luis Ospina/ Congo Films/ Efe-X
Género: Documental/ Fantástico/ Drama/ Falso documental/ PolÃtica.
La obligación, la nostalgia, la derrota y la verdad
"O deserts down below us
And storms up above
Like a stray dog gone defective
Like a paper tiger in the sun"
-Beck, Paper Tiger
Collage
Pedro Manrique Figueroa (ChoachÃ, 1934) es reconocido como el pionero del collage (y del goulash) en Colombia. Es un revolucionario de espÃritu, incapaz de ceñirse a los dogmas y los sueños de dominación de sus contemporaneos. Un hombre atrapado en una historia que lo controla. Un estudiante que nunca estudió, que lo conoció todo, lo vio todo, lo sintió todo, y que desapareció en 1981 sin dejar rastro ni prueba de su existencia más allá de los rumores difusos, dispersos, como recortes de papel. Manrique toma China Reconstruye y recorta, y rodea a Mao de ángeles. Uno de los ángeles tiene la cara de Lenin, el otro es Andy Warhol. Mao flotando sobre un cultivo que se pierde en el horizonte. Los demonios corren por el campo pisando los arrozales y los campesinos. El Capitán América, castrado por una hoz y un martillo, sostiene a Mao del cuello. La virgen los cobija a ambos. Los chinos leen el libro rojo en el infierno, para siempre.
Mock-mockumental
Llamar esta pelÃcula un mockumental cómico a secas es pecar de ingenuo, o de miope. Mencionar a Chris West, como hace un crÃtico en El Tiempo, y quedarse tan campante comparando a Un Tigre de Papel con This is Spinal Tap! o Best in Show es como si al leer el Quijote, perdonarán el lugar común, dijeran que era una novela de caballerÃa de un hidalgo valiente que lucha contra gigantes.
La verdad es que Un Tigre de Papel es un documental en el sentido estricto del término, más allá de su aspecto formal. Tal vez esa sea su primera y mayor mofa: Escudarse bajo la apariencia de un mockumental delirante sobre la vida de un colombiano que estuvo en todas partes para hablarnos de todas esas partes donde estuvo, y de Bogotá, y de esos años extraños cuando todo se movÃa tan rápido, cuando la gravedad era tan fuerte que nada se sostenÃa en pie más de seis años: Todo caÃa.
Genericidad
"I'm the epitome of Public Enemy."
-Public Enemy, Don't Believe the Hype
En su aparente rareza, Pedro Manrique Figueroa pudo ser cualquiera. No sé si eso habla mal o bien de la dudosa condición de ser colombiano en esos años, o de ser cierto tipo de colombiano, pero la principal caracterÃstica de este personaje oscuro es que existió muchas veces y de distintas maneras. No hay nada sobrenatural en su historia. Es alguien real. Siempre anduvo por ahÃ. Todos lo conocieron, todos lo vieron pasar por la séptima de aquà para allá sin un peso y pidiendo plata prestada para su pensión. O socializando en galerÃas, gotereando trago. Todos lo escucharon alguna vez hablar del dÃa cuando mataron a Gaitán, de sus viajes por los paises comunistas, de su poesÃa y su arte, de sus mutables ideales polÃticos, de sus sueños de revolución.
Nostalgia
Un tigre de papel es sobre todo una pelÃcula nostálgica. «Yo querÃa hacer una biografÃa de mi generación,» nos contó Ospina al cierre de la proyección. «Yo querÃa utilizar este personaje creado por Lucas Ospina, François Bucher, Bernardo Ortiz y Carolina SanÃn para contar una historia de muchos.» La historia de un fracaso, yo añadirÃa. O de la decepción. O de la aceptación de esa decepción.
Por eso son los amigos de Ospina los encargados de contar la historia de Manrique Figueroa. Por eso hablan Mayolo y Alape y Osorio y hasta Andrés Caicedo, veladamente y desde ultratumba, y luego (como todos) mueren. Yo le dije a Ospina que Arturo Alape habÃa resultado un actor muy convincente. Ospina me respondió que Alape no era un actor, que no estaba actuando, que todos ellos estaban hablando de alguien, alguien que cambiaba de nombre, de cara, de vida, pero que era siempre el mismo. Ninguno mentÃa.
Mentiras
Cuando empezó la sesión de preguntas, Ospina dijo que él pensaba que en el cine uno mentÃa y mentÃa y mentÃa para poder decir la verdad.
Pinter
"When we look into a mirror we think the image that confronts us is accurate. But move a millimetre and the image changes. We are actually looking at a never-ending range of reflections. But sometimes a writer has to smash the mirror - for it is on the other side of that mirror that the truth stares at us.
I believe that despite the enormous odds which exist, unflinching, unswerving, fierce intellectual determination, as citizens, to define the real truth of our lives and our societies is a crucial obligation which devolves upon us all. It is in fact mandatory."
("Cuando miramos un espejo pensamos que la imagen que nos ofrece es exacta. Pero si te mueves un milÃmetro la imagen cambia. Ahora mismo, nosotros estamos mirando a un cÃrculo de reflejos sin fin. Pero a veces el escritor tiene que destrozar el espejo - porque es en el otro lado del espejo donde la verdad nos mira a nosotros.
Creo que, a pesar de las enormes dificultades que existen, una firme determinación, inquebrantable, sin vuelta atrás, como ciudadanos, para definer la auténtica verdad de nuestras vidas y nuestras sociedades es una necesidad crucial que nos afecta a todos. Es, de hecho, una obligación.")
(Tomado de acá y traducido por Andrés Villaveces acá.)
Fuente: http://www.ochoymedio.info/review/602/Un-tigre-de-papel/
Enlace a la página oficial de Luis Ospina. Acceda haciendo click aquÃ
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